Queridos amigos:

Apreciados Colaboradores:

Antes que nada reciban mis mejores deseos para el nuevo año que recién comienza, que venga cargado de abundantes cosechas de BIENESTAR y PROSPERIDAD, que les colme a cada uno de ustedes y sus seres queridos de FELICIDAD. El 2017 ha sido declarado por el Poder Ejecutivo como: “El AÑO del DESARROLLO AGROFORESTAL,” por ende, aprovechamos la ocasión para compartir con ustedes una interesante obra que todo dominicano debe de leer:

INFORMES Y RECOMENDACIONES PARA LA CONSERVACIÓN DE NUESTROS BOSQUES Y RÍOS publicado por el Plan Sierra en 1983. Es una recopilación de cinco (5) informes escritos por el ingeniero JOSÉ LUNA CASTELLANOS, dirigidos a diferentes autoridades de la nación entre 1939 y 1962. Los mismos fueron rescatados por Don Víctor Espaillat y puestos a disposición del Plan Sierra en 1979 que los publicó en 1983.

La obra contiene una breve nota de los editores que explican el contenido de la misma. Una biografía de Don José Luna escrita por sus hijas: Margarita, Conchita y Lillian en 1977 para la inauguración de la Finca escuela ubicada en Banegas en la provincia de Santiago. La misma fue prologada por Monseñor Roque Adames en agosto de 1983.

Conocí la obra de José Luna Castellanos gracias al ingeniero Marcelo Jorge Pérez, quien me facilitó el mapa con el lugar de nacimiento de los principales ríos de la República Dominicana, lo cual me ayudó a comprender mejor sobre la existencia en la Cordillera Central del Perímetro de Vida y de Seguridad Nacional de la Nación. A mediados del pasado años obtuve una copia de la publicación del Plan Sierra de 1983 gracias a la gentiliza de mi amigo de infancia Constancio Cassá y a partir de ese momento me he dedicado a la divulgación de esta excelente obra.

No fue casual que entregáramos el Informe sobre la creación de un “distrito central de conservación de montes y agua” escrito por Luna Castellanos en 1939. En dicho artículo se encuentra el mapa que hemos compartido con ustedes sobre el lugar de nacimiento de los principales ríos de la isla para su reproducción en la revista Difusión Agropecuaria (ver los números 2 y 3 del 2016). En el anexo adjunto lo encontraremos en la presentación titulada “El Perímetro de Vida y de la Seguridad Nacional de la República Dominicana” junto a fragmentos del decreto 395-16 que justifica el presente Año del Desarrollo Agroforestal.

En el prólogo escrito por Monseñor Roque Adames, este dice lo siguiente: “Pero Blas Santos, Director del Plan Sierra, me tendió hábilmente una trampa. Me tenía a manos los originales de la obra del Ing. José Luna…y me venció la curiosidad al principio, la admiración luego y el deslumbramiento al final. Más adelante dice “Entre los años 1939 y 1962 el Ing. José Luna no cesa de prever, proponer e insistir en la verdaderas y definitivas soluciones para impedir el deterioro de los suelos de la Cordillera Central, de los ríos que constituyen el potencial hídrico más notable del País, y de los bosques más poblados a esa sazón”

Los informes son los siguientes:
1)    Informe sobre la creación de un “distrito central de conservación de montes y aguas” presentado el 1 de junio de 1939 al general José (Piro) Estrella, Comisionado Especial del Gobierno en las provincias del Cibao y Consejero honorario de la Secretaría de Agricultura, Industria y Trabajo.
2)    Informe sobre el río Yaque del Norte, escrito el 14 de abril de 1941 a Don Anselmo Copello, Presidente del honorable Ayuntamiento de Santiago de los 30 caballeros. En este informe salen referencias acerca de la magnitud de las inundaciones del Yaque del Norte durante la tormenta de San Severo en 1909, que reseñamos anteriormente.
3)    Informe sobre repoblación forestal, enviado el 17 de junio de 1947 al Licenciado Marino E. Cáceres, Secretario de Estado de Agricultura, Pecuaria y Colonización.
4)    Informe sobre repoblación forestal, plan regional y fomento del turismo, entregado el 2 de septiembre de 1950 al Generalísimo Doctor Rafael Leónidas Trujillo Molina.
5)    Exposición al honorable ayuntamiento de Santiago, dirigido el 15 de febrero de 1962 al Presidente y demás miembros del Honorable Ayuntamiento de Santiago.
Tenemos la certeza de que la lectura de los trabajos del ingeniero Luna Castellanos, cuarenta y dos años después de su fallecimiento en 1975, lo traerán a nosotros por lo visionario que él fue en una época en la cual aún no se habían construidos los embalses que represan el agua de nuestros ríos produciendo riqueza para todos, riqueza que debemos de conservar y multiplicar a través de la REPOBLACIÓN FORESTAL de la República Dominicana.

Reciban infinitas bendiciones de Dios todopoderoso y mis caltelúricos saludos.


Manuel Gonzalez Tejera, MDSN
(ManEGonTe)