Directorio Ejecutivo del FMI concluye la consulta del Artículo IV de 2012 con Japón

Comunicado de Prensa No. 13/296 
05 de agosto 2013

El 31 de julio de 2013, el Directorio Ejecutivo del Fondo Monetario Internacional (FMI) concluyó la discusión de consulta del Artículo IV con Japón . 1
El nuevo gobierno anunció en diciembre de 2012 un nuevo marco político para poner fin a décadas de deflación y aumentar el crecimiento. El nuevo régimen de políticas requiere un esfuerzo coordinado de la política del Banco de Japón (BoJ) y el gobierno para reactivar la economía y crear sinergias de crecimiento sostenido a través de reformas estructurales audaces. El anuncio fue seguido por una serie rápida de las acciones.
En la parte posterior de este nuevo marco normativo, el crecimiento se aceleró fuertemente a principios de 2013. El crecimiento del PIB del primer trimestre se elevó a 4,1 por ciento (tasa anual desestacionalizada) después de dos trimestres de estancamiento. El aumento de los valores de renta variable estimulan el consumo y las exportaciones repuntaron apoyados por la fuerte demanda regional y un yen más débil. Las expectativas de inflación han empezado a aumentar y la inflación real registró un crecimiento positivo en junio.
Financieras y Cambiarias mercados eran boyantes a principios de 2013 y el período inmediatamente posterior a la flexibilización monetaria cuantitativa y cualitativa (QQme). Entre septiembre de 2012 hasta mediados de mayo de 2013, el índice Nikkei de valores aumentó en un 80 por ciento, pero temporalmente se redujo drásticamente en un 15 por ciento. A finales de junio, el yen se ha depreciado en un 20 por ciento en términos reales efectivos desde mediados de 2012. Rendimiento de los bonos a diez años se han mantenido sin cambios en torno a 80 a 90 puntos básicos desde el inicio del año, aunque brevemente disminuyeron a niveles históricos de alrededor de 45 puntos básicos tras el anuncio de QQme.
El panorama a corto plazo ha mejorado considerablemente, impulsada por el estímulo. Se espera que la economía japonesa crecerá un 2 por ciento, principalmente como resultado del nuevo estímulo fiscal y la flexibilización monetaria alimentación a través del consumo privado y con cierto retraso a la inversión. El fortalecimiento de la demanda externa, ayudado por la depreciación, y su distribución del consumo por encima del aumento del impuesto al consumo 2014 Abril apoya aún más la recuperación. En 2014, se espera que el crecimiento se moderará hasta el 1,2 por ciento como continua recuperación de la demanda interna privada se compensa por la captación fiscal del impuesto sobre el consumo de incremento-del 5 al 8 por ciento, y una corrección de los gastos de reconstrucción. En el mediano plazo, se espera que el crecimiento converja a 1 por ciento, como la recuperación de la inversión se compensa con una disminución de la oferta laboral, debido al envejecimiento de la población.
Posiciones de capital de las principales instituciones financieras han mejorado debido a un rendimiento equidad fuerte aumento de los ingresos por intermediación de documentos, y las ganancias de capital de los bonos del Gobierno japonés y tenencias de activos extranjeros, mientras que los costes de crédito en los bancos siguen siendo limitados. Las ganancias de los bancos internacionalmente activos también han aumentado debido a la relativamente altos márgenes de interés neto de los préstamos extranjeros, que aumentaron un 20 por ciento (año a año). La aplicación de los requisitos de Basilea III se inició en marzo de 2013.
Evaluación del Directorio Ejecutivo
Directores Ejecutivos señalaron que las perspectivas económicas a corto plazo de Japón han mejorado con la adopción de políticas macroeconómicas enérgicas combinando estímulos fiscales con la flexibilización monetaria sin precedentes. Los directores coincidieron, sin embargo, que las perspectivas de crecimiento están sujetas a riesgos significativos, derivados principalmente de las reformas incompletas nacionales y un entorno externo más débil, y que la aplicación sostenida del programa de reforma de las autoridades es la mejor manera de minimizar estos riesgos.
Los directores aplaudieron el nuevo marco de política monetaria, que debe hacer una importante contribución para poner fin a la deflación. Señalaron que la comunicación cuidadosa y la flexibilidad en la ejecución son esenciales para contener la volatilidad del mercado y garantizar la transmisión de la política efectiva. Al mismo tiempo, algunos directores alentaron a las autoridades a preparar planes para una eventual salida de flexibilización monetaria cuantitativa y cualitativa, aunque es probable que la salida se mantiene a lo lejos en el futuro.
Directores coincidieron en que un plan fiscal creíble a medio plazo debería adoptarse rápidamente para contener los riesgos fiscales y reducir la incertidumbre política. Señalaron que para reducir la deuda pública como porcentaje del PIB será necesario un ajuste significativo en la próxima década. En este sentido, los directores apoyaron en general los planes de las autoridades para duplicar la tasa de impuesto sobre el consumo para el año 2015, aunque algunos directores expresaron su preocupación por el posible efecto negativo sobre el crecimiento. Los directores también subrayaron que se necesitarán medidas de gasto y de ingresos adicionales más allá de 2015.
Los directores tomaron nota de la evaluación del personal que el tipo de cambio está moderadamente infravalorado en la actualidad, pero hicieron hincapié en la gran margen de incertidumbre que rodea a esta evaluación a raíz de los recientes cambios en el marco de la política macroeconómica.
Los directores señalaron que el sistema financiero es en general correcto, pero baja rentabilidad y la exposición al riesgo de tipo de interés siguen siendo una preocupación. Coincidieron en que la implementación exitosa de un paquete integral de reformas estructurales contribuiría a mejorar la estabilidad del sector financiero. Los directores aplaudieron los recientes avances en la reforma de la regulación, pero pidió un fortalecimiento de las normas de capital de los bancos regionales, y el seguimiento cuidadoso de la financiación extranjera de los principales bancos.
Los directores subrayaron que el nuevo marco monetario debe ser apoyado por las reformas estructurales de amplio alcance, que pueden desempeñar un papel clave en los esfuerzos de las autoridades para erradicar las expectativas deflacionarias y lograr un crecimiento auto-sostenible. Ellos instaron a la aplicación firme de una agenda integral enfocada en la reducción excesiva dualidad del mercado laboral, la desregulación de la agricultura y los servicios, la revitalización de las pequeñas y medianas empresas, la eliminación de restricciones en la oferta de capital riesgo para las empresas, la creación de incentivos fiscales para trabajar e invertir, y aún más relajante los requisitos de inmigración. Los directores aplaudieron las medidas del gobierno para impulsar el empleo de mujeres, así como, en general, su intención de unirse a la Alianza Trans-Pacífico.