Extracciones  de oro sin acompañamiento técnico afectan su entorno

Asociación pide al Ministerio de Medio Ambiente intervenir las operaciones de "los topos"

Cada día, cientos de buscadores de oro, denominados por los vecinos como "los topos", se desplazan desde el municipio de Villa Altagracia y sus alrededores a cavar las laderas del río Isabela, en su trayecto desde Villa Altagracia al municipio de Pedro Brand y la sección La Cuaba.
Evidentemente el daño ecológico es visible. Decenas de hoyos profundos y galerías subterráneas que por profundidad ponen en peligro la vida de los buscadores de oro y a los demás usuarios del río.
La cantidad de cuevas hechas por los buscadores de oro, ayudan a la evaporación del agua del cauce, y su nivel, ayudado por la temporada de sequía ha bajado considerablemente el caudal y amenazado los acuíferos vecinos.
El daño ha llamado la atención de la Asociación de Agricultores San Nicolás del Sol que preside Carlos Mariano preocupados por las condiciones en que se encuentra el otrora caudaloso río Isabela.
Pero además porque los "topos" o buscadores de oro, además de esta tarea, asaltan las propiedades donde ellos cultivan víveres y crían animales, lo que podría degenerar en enfrentamientos, advierten los señores  Casimiro Montero, Vicepresidente de la Asociación, doctor Alejandro Robles, encargado de finanzas, Sergio Rafael Batista, primer vocal, y Leonidas Delgado, miembro.
Casimiro Montero explicó que el río Isabela es uno de los más importantes del municipio Santo Domingo Oeste, después del Haina, y que es el caudal de agua usado por cientos de productores y vecinos del municipio de Pedro Brand y otras vecindades y se requiere su conservación y la protección de su entorno.
"Ahí se han introducido un centenar de personas que vienen de Villa Altagracia y otras comunidades, atraídos por la búsqueda de oro en la ribera del río y han hecho una gran cantidad de hoyos, lavando tierra y arena y por esa labor el río tiene expuestos su capa freática y  sus acuíferos a la evaporación, por lo que consideramos que deben intervenir las autoridades del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales. Usted pasa ahora mismo por ese río y eso da pena, en lugar de agua, lo que lleva es lodo, de la gran cantidad de tierra y arena extraída".
Montero señaló que en un gran trayecto, el río presenta numerosas cuevas y galerías subterráneas echas por los buscadores de oro y que pone en peligro la vida de ellos y la de otros transeúntes que no estén advertidos de dónde está cada cueva.
Los cavadores han afectado las laderas del Isabela en las proximidades del asiento del Campamento 16 de Agosto, hogar de la Primera Brigada del Ejército y avanzan hacia el poblado conocido como "La Estancia" en rumbo a la sección "La Cuaba".
"Todo lo que es el Vacacional Isabela, está siendo bien afectado por los hoyos. Nosotros tenemos nuestras parcelas en la vecindad del río y se nos están perdiendo las siembras y los animales", apuntó Montero.
Nos preocupa la forma en que ha sido afectado el río, que es un recurso que nos pertenece a todos, y no podemos permitir que lo destruyan en la forma que lo hacen, y que todos estamos convocados a preservar y por tanto le hacemos un llamado a las autoridades de Medio Ambiente para que regulen esta situación,  señaló el dirigente agropecuario.
Dijo que es necesario un acompañamiento técnico por parte de Medio Ambiente, ya que las autoridades del Ayuntamiento de Pedro Brand, se han hecho de la vista gorda, ante los reclamos de la Asociación.
"El caudal del río se agota, está sucio y contaminado y estamos muy preocupados por el deterioro del lecho.Son cientos de personas que a diario se desplazan desde Villa Altagracia y sus alrededores a cavar las orillas y están afectando los acuíferos que alimentan el río.
El río Isabela atraviesa numerosos poblados y secciones en la parte Oeste de la provincia Santo Domingo y el Norte de Villa Altagracia, antes de su desembocadura en el río Ozama en Santo Domingo, capital de República Dominicana.