El “Día del IICA” se celebró en Washington para enfatizar la importancia y contribución de los pequeños productores, incluyendo mujeres, a las economías nacionales en América Latina.


Washington, 14 de noviembre, 2012 (IICA). Como parte de las celebraciones por los 70 años del Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA), la Oficina en Estados Unidos de esta entidad celebró la séptima versión del IICA Day o Día del IICA en la sede de la Organización de los Estados Americanos (OEA), con un panel en el que agricultores y expertos discutieron los retos que enfrentan los pequeños productores en América Latina y el Caribe.
El Secretario General Adjunto de la OEA, Embajador Albert Ramdin, manifestó que “crear capacidades entre los pequeños productores y darles herramientas que aseguren su éxito es importante. Esto significa acceso a información sobre mejores prácticas agrícolas, información de clima y precios de mercados, así como instrumentos para crear sus propios negocios”.
Este año, el Día del IICA estuvo dedicado al papel de los pequeños productores y su aporte a la seguridad alimentaria, así como los retos que enfrentan para acceder a nuevos mercados y aquellos relativos al cambio climático, en especial para los agricultores en ambientes muy frágiles y vulnerables.
David Hatch, Representante del IICA en EE. UU., indicó que el encuentro tuvo el propósito de informar acerca de las realidades de los pequeños productores en América Latina y el Caribe, y promover cambios en las políticas que los apoyan.
El lema del IICA Day fue La importancia de los pequeños productores para la seguridad alimentaria de las Américas.
En América Latina existen al menos 14 millones de pequeños productores que cultivan cerca de 100 millones de hectáreas, lo cual representa entre el 30% y 60% del área total de cada país, dijo Hatch. “Debemos promover la agricultura sostenible no solo para la seguridad alimentaria, sino para la estabilidad civil, la democracia y el comercio” manifestó.
Tres pequeños productores se refirieron a los retos que enfrentan para acceder a mercados muy demandantes. Rosa Guamán, de la Asociación de Productores Jambi Kiwa, en Ecuador, dijo que las comunidades agrícolas indígenas pueden transformar sus actividades en negocios de exportación muy lucrativos.
Guamán compartió la historia de un grupo de mujeres extraordinarias en las montañas de los Andes, quienes se han organizado para producir tés de hierbas de alta calidad que exportan a Europa, Japón y Canadá. “No más dependencia, nosotras somos las nuevas empresarias”, manifestó.
En el panel, Mauricio Lastra, presidente de la Asociación Nacional de Fundaciones PRODUCE (COFUPRO), de México, indicó que en ese país se ha consolidado una red de innovación tecnológica en la que participan unos 3.500 productores, quienes definen la agenda de investigación.
Lastra indicó que anualmente PRODUCE financia unos 1.100 proyectos que benefician a los pequeños productores.
El sacerdote Freddy del Villar Zúñiga, director de la Unidad Académica Campesina de Bolivia (UAC), explicó que esta universidad proporciona capacitación vocacional a jóvenes rurales de escasos recursos. El modelo es “aprender-haciendo”, en el que los estudiantes trabajan varias horas en el centro de enseñanza para aportar a la educación que reciben, así no se vuelven dependientes.
“Mi mensaje es que debemos escuchar a los jóvenes y darles la oportunidad de tener una educación decente, integral y con valores”, expresó.
Desde su establecimiento en 1942 por el Vicepresidente de EE. UU., Henry Wallace, y en sus 70 años de existencia, el IICA ha enfocado sus esfuerzos en el desarrollo de los pequeños y medianos productores. “Nuestros especialistas trabajan para promover políticas que los apoyen, mediante las cuales logren salir de la agricultura de subsistencia, de la pobreza y el hambre crónicas, y puedan obtener mejores ingresos y mayor bienestar”, concluyó Hatch.
Al encuentro en la sede de la OEA en Washington asistieron prominentes figuras, incluidos embajadores, representantes de organizaciones del gobierno de EE. UU., representantes de ONG, firmas consultoras y estudiantes.